Hace un tiempo comparábamos
algunas de las aplicaciones que puedes instalar en tu móvil para grabar rutas, hoy toca hablar de unos cacharros un poco distintos. En inglés los denominan
GPS data loggers (prueba a
buscar esas palabras en Amazon) y en algunas tiendas españolas también (por ejemplo, en
zona GPS). Supongo que la traducción sería algo así como "Registradores de datos de GPS" pero creo que es mejor hacer una traducción libre y denominarlos "grabadores receptores de GPS". ¿Y para qué valen estos cacharros? Pues básicamente para
grabar rutas, aunque también se pueden usar para geoposicionar fotos o vídeos y almacenar marcas o puntos de interés. Además, algunos (casi todos) pueden ser usados como
receptores externos de GPS conectables a un ordenador (por USB o Bluetooth) o a un telefóno móvil o PDA (por Bluetooth), añadiendo capacidad de localización a dispositivos que no lo tienen.
Supongo que lo que te preguntarás en este momento es: ¿cuál es la ventaja de usar esto y no un móvil? El móvil vale para grabar rutas, para hacer fotos y vídeos e incluso geoposicionarlos, y para almacenar puntos de interés (además de permitir hablar por teléfono, enviar mensajes de texto, mensajes multimedia, ...), ¿qué es lo que aporta un GPS data logger que no puede hacer ni fotos, ni vídeos, ni llamadas, ni nada que no sea aquello para lo que están estrictamente diseñados? Vayamos por partes.